Concretamente el miedo al compromiso existe pero desgraciadamente es una manifestación de otros ámbitos de la sociedad enferma en la cual vivimos. No interesa algo que dure, algo que tenga sus ratos buenos y ratos malos, algo que poco a poco se pueda ir arreglando con mucho esfuerzo. Eso ya no interesa.
Ahora lo que interesa es el usar y tirar. ¿Por qué? Porque es mucho más sencillo. El mundo económico ha trascendido a las relaciones en general y a las sentimentales en particular. Si algo no es rentable, se usa hasta que deje de ser rentable y después, se tira. Y poco después se busca otra cosa -lo que sea- que sea rentable hasta que deje de serlo. Y el proceso se repite ciclicamente una y otra vez, una y otra vez.
¿Quién quiere a un amigo que sólo plantee problemas y no aporte nada? ¿Quién quiere a su lado, una pareja que sólo sea una fuente inagotable de malos rollos?
Aún así yo estoy completamente convencido que el lazo que se puede crear entre dos persona es mucho más fuerte con el dolor y llena mucho más que con el placer. Y es sencillo de entender:
Sólo quien ha atravesado o atraviesa problemas junto a otra persona puede entender y comprender el vínculo que se crea: la intimidad, la confianza, la complicidad y el apoyo.
Sólo una persona que comparta lo malo, puede compartir lo bueno. Y sobre todo, una persona que esta en lo malos ratos, sin ningún genero de dudas, lo estará también en los buenos ratos.
Así se crean los vínculos y las conexiones.
Y eso no se crea con los ratos buenos. Los buenos ratos, sirven para otras cosas.
Escuchando: Arctic Monkeys - Brianstorm
1 comentario:
Me ha encantado. Un 10.
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