Sin duda es cierto. La música atenúa las penas y acentúa la felicidad. Ella, en cualquier momento, en cualquier ocasión, puede servir para complementar esa situación que pensabamos que no se podía mejorar.
Ella, puede ser el acompañante que necesitas cuando estas en soledad. Ella es sin duda la mejor manera de evadirte. No pide explicaciones, no necesita excusas. Siempre esta ahí.
Te ayuda a recordar un momento en concreto, recordando así la música de aquel momento. De éste modo, es posible potenciar el propio recuerdo;
La canción aquella que relaciones con un viaje porque escuchaste aquel disco muchas veces;
Una melodía que relacionas de alguna manera con ese objeto;
Un tema que relacionas a una persona, bien porque le gusta o porque lo detesta;
Una canción con la cual recuerdas aquel lugar;
Aquella canción que sonaba en aquel sitio con aquella persona;
Una canción que hizo que todo cambiara;
Puede ayudarte, y sin duda lo hace. Pero también puede herirte, y sin duda, lo hace.
Escuchando: Buscando la canción que necesito...
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