¿Por qué?
Porque en un mundo de ciegos, el tuerto es el rey.
La historia que envuelve a este señor es fascinante. Cada vez que paso por delante de su estatua, recuerdo su historia.
Básicamente fue caballero de un rey español, primero de Sancho II y posteriormente de de Alfonso VI que fue su sucesor.
Rodrigo fue un caballero leal a su rey, aunque éste al ver que la reputación de Rodrigo aumentaba día a día gracias a sus victoriosas y épicas batallas, comenzaba a ponerse celoso de él.
Era tal los celos y la envidia del rey, que desterró a Rodrigo y a un centenar de sus leales caballeros.
Después de 6 años, el rey le pide ayuda a Rodrigo. Estaba en problema y necesitaba a un guerrero vigoroso como lo era Rodrigo. El rey sabía que si Rodrigo lideraba sus ejércitos, mucha gente le apoyaría. Y así fue. Gracias a Rodrigo, Alfonso VI salió victorioso de aquella batalla.
Pero la fama de Rodrigo era enorme casi igual que su maestría manejando a tizona, su espada.
No se sabe si por su fama, aún mayor, o bien por un malentendido Alfonso VI volvió a desterrar una vez más a Rodrigo.
Se dice que diez años después, recuperó Lérida, Tortosa, Valencia, Denia, Albarracín, y Alpuente que por aquellos tiempos, estaban en poder de los árabes.
Después de este viaje en el tiempo, lo que más me gusta de la historia es recordar a Rodrigo como aquel que fue: Un caballero de honor, fiel a su rey y que además luchaba por la cristiandad.
Todo esto es lo que siento cada vez que paso por la estatua.
Y como curiosidad; Si una estatua de una persona a caballo tiene dos patas en el aire, la persona murió en combate. Si el caballo tiene una de las patas frontales en el aire, la persona murió de heridas recibidas en combate.Si el caballo tiene las cuatro patas en el suelo, la persona murió de causas naturales.
Podemos ver en la foto, como efectivamente, es así.
¿Conoce nuestra empresa? -Sí
¿Tiene experiencia en el sector? -Sí
¿Nivel del inglés? -Alto
¿Cuántos idiomas sabe? -5, sin incluir el materno.
¿Alguna vez has pensado qué harías si pudieras viajar en el tiempo? Si lo has hecho ya somos dos.
Me he pasado media tarde luchando con la pereza y la otra media leyendo cosas acerca de este tema.
Es un tema apasionante, más para un ignorante en la materia como yo, que no sabe muy bien lo que es realmente verdad y lo que no. Pero he de confesar, que después de haber estado echando un vistazo es un tema interesante.
¿Por qué?
Bueno, imaginemos que podemos viajar al pasado. Si yo viajo al pasado y mato a mi tatatatarabuelo, yo no nacería nunca. Si no naciera nunca, no podría haber viajado al pasado. Si no hubiera podido viajar al pasado, no habría matado a mi tatatatarabuelo.
Joder, que complicado. Bueno, imaginemos algo menos macabro; Viajo al pasado y de alguna manera modifico la historia. Por ejemplo, viajo en el tiempo 550 años hacia atrás, época en la cual Cristóbal Colon aún era un buen mozo y lo asesino.
Entonces hay 3 opciones:
- Lo primero que se me ocurre es que al hacer tal cosa, Cristóbal, no descubriría América, como es evidente. Pero en su lugar lo haría cualquier otro para así seguir con la continuidad de acciones históricas que están marcadas. Para entendernos, no podríamos cambiar la historia. Sólo cambiaríamos matices en el peor de los casos.
- Lo segundo es que debido a la muerte anterior, el cauce de la historia cambia por completo. América no es descubierta, España no viviría sus mejores años gracias a ello etc... etc... Con lo cual, afectaría directamente en el presente, desde donde yo viajaría.
- La tercera, es exactamente igual que la segunda con la modificación de que el presente desde el cual viajo no pueda ser modificado, pero aún así se cambiaría la historia en otra línea temporal o en otro universo paralelo.
¿Líneas temporales? ¿Universos paralelos? Quita quita…
Todo esto sería viajando al pasado. Pero... ¿Y si viajamos al futuro? Si viajase al futuro y me encontrase conmigo mismo. ¿Qué CARA me pondría?
Perplejo me hallo.
¿Te cambia el humor cuando tienes hambre?
Porque teniendo en cuenta que:
* Nunca vamos a conseguir miles y miles de visitas ni, muchísimo menos, ganar dinero con nuestro blog, ni conseguir el Pulitzer.
* No creemos que la calidad de un blog venga marcada por su número de visitas ni por la cantidad de páginas que lo enlacen.
* Sabemos y aceptamos que el 80% de nuestras visitas procederán de nuestros colegas, y estamos felices con ello (O como mínimo, nos conformamos).
Y, sobretodo:
* No escribimos para satisfacer al lector, sino para satisfacer nuestras ansias de escribir y comunicar. Si sólo a diez personas les gusta nuestro blog, estaremos tan felices como si lo hacen 1.000.
Manifestamos que:
* El miedo a que un post no guste provoca una retorcida forma de autocensura. Una autocensura que coarta nuestra libertad artística y comunicativa. Nosotros no somos medios de comunicación forzados a vigilar nuestra popularidad. Tenemos el privilegio de no tener por qué tener miedo al mercado ni a las críticas… ni al olvido. ¡No lo tengamos!
* Es posible que seamos felices si uno de nuestros posts se hace popular y se difunde por la blogocosa. Pero nos comprometemos a no buscarlo, ni escribiendo lo que consideraremos más popular, ni de ninguna otra forma.
* Somos personas complejas, no máquinas especializadas. Por ello, escribiremos aquello que nos parezca interesante compartir, sin importar su temática ni su idoneidad.
Y, en resumidas cuentas:
* Este es mi blog.
* Yo me lo guiso, yo me lo como.
* Si a alguien no le gusta, que no lo lea.
Cada día me sorprendo más con este personaje. Digo personaje porque tengo que convencerme a mí mismo de que este hombre está interpretando un papel, de la misma manera tengo que convencerme de que le cueste hacerlo debido a la idiocia de él o de ambos, nunca se sabe.
Me avergüenzo. Me avergüenzo mucho. Cada año intento no fijarme demasiado en la persona o conjunto de personas que van a ir a eurovisión representando a España. Si te paras a pensar, nos van a representar delante de Europa en una gala vista por millones de personas de todas partes. Pero este año no, no podía ser tan fácil...
Como he dicho, cada año intentaba ignorar tanto el participante español como la gala completa. Pero este año... han llegado muy lejos. Demasiado lejos…
Y todo empezó en un programa de la secta, con el personaje abyecto de buenafuentes en el programa que lleva su mismo nombre, también conocido como el programa de las risas enlatadas. ¿Cómo es posible que este señor, buenafuente, sea capaz de crear un personaje tan siniestro para su programa? ¿Cómo es posible que desde un programa de televisión -medio en broma, medio enserio- pueda lanzar a un indigente intelectual hacia eurovisión con total impunidad? ¿Cómo es posible que las personas voten a este personaje para que vaya a eurovision?
Lo peor de todo no es eso, lo peor de todo es ver como la secta en cualquier espacio de su programación intentan meter una cuña musical del chiki-chiki para no se muy bien qué. Es despreciable.
¿Cuánto ha perdido eurovision para que vayan personajes de este calibre?
Y no, no me vale la excusa de que los demás países manden frikis idénticos o peores, eso ya no me vale.
Es más fácil conocer al enemigo, que al amigo.
Ya lo dice el refrán. Los enemigos son tan necesarios como los amigos, es así. Los antagonismos son necesarios, si no hubiera luz no habría oscuridad si no existiera el bien no disfrutaríamos del mal... sin desamor no habría amo, sin cara triste no habría cara feliz y así podría seguir hasta la extenuación.
Pero bueno, me refiero a esa clase de personas que sin saber muy bien porqué, cómo o cuándo se pasaron al lado oscuro. Ya sea por ideas contrarias a las tuya, por el modo diferente de vivir la vida, porque "fulanito le ha dicho que tú has dicho vete-tu-a-saber-que" o simplemente porque aquel cree en "carpe diem" y tú no.
¿Cómo reconocer a los enemigos? Lo peor no es no saber localizar a tu enemigo, es ser uno mismo su propio enemigo.
-Señora rutina, ¿Qué debo hacer para que se vaya de mí, de mi vida?
-Me temo que a eso no te puedo responder
-Ah...¿Y quién puede?
-No te puedo responder a eso tampoco
-¿Qué puedo hacer entonces?
-Convénceme