Cada día me levanto y desayuno lo mismo. Tardo lo mismo en ver cómo vestirme, NADA.
Salgo a la calle siguiendo el mismo camino, escucho el mismo programa de radio que cada mañana me descargo de internet. Cada día hablan de lo mismo. Me canso, pongo el ipod en modo "aleatorio". A pesar de tener un número de canciones superior a las 500 me da la sensación de que siempre escucho lo mismo.
Por la calle me encuentro siempre con la misma gente, incluso hay días en los que creo que ellos también saben que me ven cada mañana. ¿Ellos también son iguales de observadores? Poca importancia tiene.
Siempre lo mismo, las mismas personas, las mismas caras, las mismas conversaciones. Lo mismo.
La rutina es una de las cosas más despreciables de esta vida, ya que tarde o temprano caerás en ella.
La felicidad no es una rutina deseada, es todo lo contrario, es no tener rutina deseada.
-Señora rutina, ¿Qué debo hacer para que se vaya de mí, de mi vida?
-Me temo que a eso no te puedo responder
-Ah...¿Y quién puede?
-No te puedo responder a eso tampoco
-¿Qué puedo hacer entonces?
-Convénceme
Jamás lo conseguí
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