Como la vida misma

Hace muchos años que tengo messenger. Hoy me decidí a hacer una limpieza entre mis contactos;

Tenía cerca de 200 contactos, ahora después de la purga, tengo menos de 100. Lo mejor de todo, es que tengo menos de 100 y aún tengo a gente sin admisión. Pero... eso no es todo... tengo unos... 40 contactos en "cuarentena" que en los próximos días pasaran a mejor vida. 40 iconitos que nunca saludan, nunca hablan o nunca se conectan. ¿Para qué quiero yo eso? Exacto, para nada.

Lo gracioso, es que todo el mundo tiene cientos de contactos pero siempre habla con los mismos cinco o seis, o al menos, ese es mi caso. ¿Para que quieres tener cientos de contactos si no hablas con ellos? ¿Para ser POP?

El messenger es como el móvil, te descuidadas un par de años, miras la agenda y descubres que tienes a mucha gente que ni son simpáticos, ni conoces y apenas tratas.

¿Por qué la gente se empeña en ser amigo de todo el mundo? ¿Por qué intentan ser simpáticos con todo el mundo, caer bien a todos cuando es imposible?

Es una cosa verdaderamente sorprendente, que nunca llegaré a entender.


Escuchando: Sergio Dalma - A buena hora