Te conocí tiempo ha, vivimos cosas terribles y cosas maravillosas; Me enseñastes muchas cosas y otras las descubri por mí mismo, como no, con tu ayuda.
Las noches que nos vemos, rezo porque seas compasivo con mi persona y me dejes tocarte, abrazarte, mirarte fijamente y disfrutar de tu presencia...
Veces hay, arrepintiéndome, situaciones que no pude -ni puedo- controlar.
No por ello, te rechazo, no me atrevería...
Sueño contigo, no es suficiente, pero sé que no te puedo tener cada noche... cada momento... imposible ser.
Y es que... Preferiría pasar mi vida cerca de las aves, a desperdiciarla deseando tener alas...
1 comentario:
COJONES YA
Publicar un comentario